Taller en el taller: una experiencia que te sumerge en la historia del té
Actualizado: 19 ene

En el día de ayer concurrí al espacio de Gabi Leite - Tea Designer, a la experiencia de degustación de Té verde y negro.
La propuesta se llama "Taller en el taller" y durante 2 horas, Gabi comenta sobre los orígenes del té, las variedades que existen, cómo se produce, las propiedades de las distintas hierbas que se mezclan en un blend y la diferencia entre la ceremonia del Té en China e Inglaterra.
La degustación es para 4 personas, hay distintas variedades de té frío y caliente, acompañados de bocaditos dulces y salados, realizados con especias.
A su vez, me gustaría hacer una breve introducción sobre la historia del té y las variedades que existen actualmente.

Si bien se desconoce con exactitud la época en la que se crea el té. Cuenta la leyenda china, que el té surgió de la mano del emperador Shen-Nung, quien vivió hace unos 5.000 años. Un día, el emperador se sentó bajo la sombra de un árbol para descansar y hervir agua, como era su costumbre, cuando unas hojas de ese árbol cayeron de manera casual en el agua. Shen-Nung probó el fortuito té y se sintió reconfortado, encargando a sus súbditos plantar semillas de ese árbol.
Pero existe otra leyenda que sostiene, que el emperador comió algo que le hizo mal, enfermándolo y que le prepararon una infusión con distintas hierbas para curarlo y luego, esa infusión (lo que sería el té) se hizo habitual. Si bien la fecha de los orígenes no es clara, la historia si demuestra que el té es originario de China.

Más adelante, durante la dinastía Tang, los eruditos budistas japoneses de visita por China llevaron semillas de té de regreso a Japón y con el tiempo lo hicieron parte de su cultura.
Luego, con Marco Polo, y la ruta de la seda, el té llegó a Europa. Pero fueron los holandeses los que se dieron cuenta del potencial comercial, ya que el té era muy costoso y sólo la clase alta podría acceder a su consumo. Asimismo, con el transcurso del tiempo y el casamiento entre Carlos II de Inglaterra y la princesa portuguesa Catalina de Braganza (conocida como la amante del té) el té se introdujo en Inglaterra y los ingleses lo hicieron parte de su costumbre.
